Sant@s y Beat@s Vicentinos

Beato Hermano Estanislao Páramo Marcos - 6 de Noviembre

Beato Vicentino

Nacimiento: Pedrosa Río U (Bu) 07/05/1885

Padres:            Isidoro y Lucía

Bautismo: Pedrosa, Parr. Sta. Juliana 07/05/1885    

Votos:           Valdemoro (Madrid) 15/03/1914

Martirio:        Madrid 11/08/1936

MINISTERIOS Y APOSTOLADO: 

 A los veintiséis años sintió la vocación de Hermano coadjutor de la Misión. Pudo influir en ella el ejemplo de su primo Perfecto del Río Páramo.

Estanislao_Paramo_Marcos

Durante el noviciado tuvo por maestro al P. Agapito Alcalde Garrido, martirizado también en la persecución religiosa el año 1936.

El Hno. Estanislao Páramo tuvo destinos muy diversos: Villafranca del Bierzo (León), Limpias (Santander), Murguía (Álava). Todos eran colegios de segunda enseñanza y en todos dejó ejemplos de santidad.

No solo era bueno, sino que hacía buenos a cuantos trataban con él, rezumaba bondad, ejemplaridad comunicativa. El 30 de julio de 1933 volvió a la casa provincial de Madrid.

 MARTIRIO:

  El Hno. Estanislao vivió la persecución y preparación para el martirio con su comunidad de la casa provincial de García de Paredes, 45. El jueves 23 de julio por la tarde los milicianos con descargas cerradas de ametralladoras y fusiles atacaron la casa provincial con verdadero furor.

 Los religiosos se refugiaron en el templo preparándose para morir con el rezo del trisagio, la confesión sacramental y la constante invocación a la Stma. Virgen.

Al día siguiente a las 11,30 de la noche asaltaron en avalancha por las tres entradas del edificio a un mismo tiempo. Hicieron salir a todos los religiosos de sus habitaciones y bien custodiados empezaron los interrogatorios y amenazas.

La mayor parte de la comunidad quedó encerrada en la zona del teléfono que estaba vigilado por una miliciana. Dispuestos a matarlos a todos, uno de ellos les advirtió: “No tenemos que dar esta nota desagradable que llamaría mucho la atención, pues son muchos”.

Entonces los milicianos dijeron: ‘mañana volveremos y terminaremos’ y se marcharon. Al día siguiente, 25 de julio, los religiosos fueron buscando refugio como pudieron en diversas partes.

Como se dice en la biografía del Hno. Perfecto, ellos dos encontraron amparo en la casa su primo el sacerdote D. Cecilio del Río, en la calle Libertad, 23. De allí los sacaron los milicianos el día 7 de agosto y martirizaron a los tres: el sacerdote y los dos religiosos, junto al matadero de Madrid, el 11 de agosto de 1936.